La guía definitiva para Citas bíblicas de esperanza
La guía definitiva para Citas bíblicas de esperanza
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Que el Señor de paz les conceda su paz siempre y en todas las circunstancias. El Señor sea con todos ustedes.
«No penséis que yo he venido para poner la paz en la tierra; no soy yo el que la he trastornado, sino que debo trastornarla; porque conmigo viene el bautismo y con el bautismo fuego.
Y el Dios de esperanza os llene de todo Satisfacción y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.
La próxima entrada en la Semana Santa es el inicio de esta escuela de sufrimiento. Y abre un camino que nos permite releer aquellos tiempos de dolor que estamos llamados a atravesar de tiempo en cuando.
Descubre una fuente inagotable de esperanza en Dios a través de nuestros inspiradores versículos bíblicos. Encuentra consuelo y fortaleza en la palabra divina mientras exploras mensajes de confianza, renovación y promesas de un futuro brillante.
Este versículo es un recordatorio de la importancia de tener confianza en Dios y estar seguros de nuestro valor y dignidad como hijos de Dios.
Nos invitan a reflexionar sobre nuestro propio pecado y a admitir el regalo de la salvación que Cristo nos ofrece a través de su sacrificio en la cruz.
Esto significa que debemos ser testigos valientes frente a el rechazo de las personas, confiando en Dios para darnos el valencia necesario para confrontar cualquier situación. Jesús nos da un ejemplo consumado al fallecer en la cruz por nuestros pecados, mostrando que Él tenía confianza en su Padre celestial y estaba seguro de su valencia como Hijo de Dios.
Es importante memorar y reflexionar sobre el sufrimiento que Jesús experimentó durante su crucifixión, sin embargo que nos ayuda a comprender el talento de su sacrificio y a valorar el perdón y la salvación que ofrece a todos aquellos que creen en él.
No es que a la pasión de Jesús le falte poco, pero ha dejado un sitio para que incorporemos a ella nuestros propios sufrimientos, haciéndolos valiosos y con sentido.
Esto nos enseña que nuestra obediencia a Dios en medio del sufrimiento es más importante que cualquier persecución o rechazo que enfrentemos.
Pido asimismo que les sean iluminados los Fanales del corazón para que sepan a qué esperanza él los ha llamado, cuál es la riqueza de su gloriosa herencia entre los santos, y cuán incomparable es la vastedad de su poder a cortesía here de los que creemos.
El sufrimiento es también un momento de verdad. Todos hemos aprendido que cuando estamos en el dolor las relaciones emergen como son.
Y la esperanza no acarrea vergüenza porque el aprecio de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido cubo (Rom 5:5).